viernes, 4 de febrero de 2011

Las redes sociales las carga el diablo.

¿La conquista amorosa y la infidelidad son rehenes del avance tecnológico?

Yo creo que sí y paso a explicar.

Hace no tanto tiempo, un chico cuando quería salir con una chica, la tenía que ver en el baile, en el liceo o esperar que a tal hora pasara por la puerta de tal lugar.

Uno hacía esfuerzos que contribuían con el interés.

O sea, si yo tengo que averiguar donde vive, a qué liceo va o a qué hora sale del inglés para esperarla a que a las 5 de la tarde pase por la calle de la sombra, quiere decir que me preocupo, investigo y razono, solamente por el hecho de verla pasar un segundito delante de mis ojos.

Digamos la verdad, ¿QUÉ SEGUNDITO NO?

Segundito que se hacía tan largo, como esas tomas en cámara lenta de película de amor.

Lo más complicado aún, era que esas situaciones requerían de todo un proceso, en el que ella te registraba de a poco, como para que un día, vos pudieras acercarte por lo menos para preguntarle la hora.

El día que lograbas sacarle el número de teléfono era la gloria.

A veces, ni siquiera tenía teléfono. Muchas veces era el de la vecina.

Entonces, un día te animabas a llamarla y atendía Miriam, la vecina de la casa de al lado y le pedía a su hija (amiga de tu interesada) que le gritara a su amiga por la ventana del fondo, para que viniera, porque la estaba llamando un chico llamado Norberto, o sea vos.

En caso que ligaras y su familia tuviera teléfono, no podías llamar más tarde de las 22:30, si no el padre de la chica te comunicaba con voz seria y grave algo así como “¿No le parece un poco tarde para llamar a una casa de familia?. Acá en esta casa mañana todos nos levantamos temprano”. Uno no tenía más remedio que pedir disculpas, mientras te cagabas de frío y los cospeles bajaban como loco, en la esquina de Tacuarembó y 18, porque no podías llamar de tu casa, ya que tu vieja te había re cagado a puteadas porque todos los meses llegaban millones de dólares de cuenta telefónica.

Y ni hablar del chat telefónico de los 90, donde llamabas al 09001234 y hablabas con otras chicas que no conocías, y podías arreglar encuentros, salidas, etc.

Yo sentía que era el invento más genial del mundo, no tenías que gastar plata en estar a la moda, no tenías que estar bañado y ni siquiera ser un poco lindo, creo que era lo más parecido a una isla con chicas con ropa ligera, solo para vos.

Pero inclusive en esa situación, uno tenía que ser dúctil con la voz y con el contenido.

Todos estos problemas amorosos se agravaban terriblemente cuando uno quería cometer una infidelidad.

Imaginate si por derecha, uno tenía todos estos obstáculos, ni te digo lo complicado que era cuando la mano era media promiscua o tramposa.

Pues, en los tiempos que corren, todo es mucho más fácil.

Cuando estás aburrido, le mandas un SMS igualito a las quince chicas que les robaste el teléfono, porque lo publicó en el Facebook, que dice por Ej.: “¿En qué andas?” y claro, tenés que andar muy mal o estar meado por un rinoceronte embalsamado, como para que por lo menos, una de éstas quince chicas no te responda “¿Acá, medio aburrida, vos? Y bueno, todo sabemos que sigue luego.

O el propio MSN, sustituto del 09001234, que ha hecho casar y engañar a cualquiera, con un trabajo fino y diario, donde podés estar trabajando en la presentación más encumbrada y complicada, que igual podes mandar cada tanto una carita o unas palabras que vayan taladrando lentamente el cerebro de la otra persona y así un día lograr tu cometido.

Y ni hablar del Facebook, porque de última con el MSN o el SMS, tenías que conseguir un dato para ponerte en contacto, pero con el Caraelibro, solo con saber el nombre de la persona que querés contactar, ya te ponés en línea con todas las fotos y los videos personales que éste ser humano tiene, y no solo él, sino también los de sus amigos, novios y compañeros de trabajo.

En resumen, creo que todos vamos a convenir que más fácil es, y que se ha tornado mucho mas promiscuo y peligroso también.

Ventajas: en un país como Uruguay donde todavía algunas chicas piensan que estar con muchos hombres es de trola y muchos chicos, que estar con muchas mujeres es de re macho. Esto sacó un poco de prejuicios tontos.

Desventajas: te podés volver menos selectivo, valorando más la cantidad que la calidad, donde gana el más rápido y no el más interesante.

Por eso y como frase final vuelvo a decir:

A LAS REDES SOCIALES, LAS CARGA EL DIABLO.

2 comentarios:

  1. Hola que tal soy patty la administradora de un nuevo directorio http://directorio-peru.blogspot.com te invito a formar parte de el, sera un honor tener tu site en nuestro directorio.

    Patty Yañez

    Saludos.

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  2. Hola, como estas? Contame un poco de que se trata y con mucho gusto puedo llegar a ser parte.
    Para mi también sería un honor.
    Gracias

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