lunes, 24 de agosto de 2009

¿La Noche de la Nostalgia o el Día de la Independencia?

No tengo dudas que si algo tenemos que festejar en este país es nostalgia, no sé bien de que cosas, pero nos encanta decir que añoramos cosas que ya no tenemos. Pero por otro lado, creo que festejamos mucho más que eso.

Creo realmente que festejamos Independencia por una noche.

Es raro, porque nadie dice que la noche de la Nostalgia es el mismo día que la de la Independencia de este - nuestro querido y apocado - país.

O sea, más allá que la gente además de bailar, cene, vaya al cine o lo que sea, siempre termina en baile, y ese baile, (factor indispensable de esta gran noche) siempre es después de las 0 horas, por ende la gente festeja el día de la Independencia y no el de la Nostalgia.

Es la noche en donde la mayoría de la gente que sale poco, o mejor dicho casi nunca, logra independizarse de las cuentas, de los hijos, del trabajo, de los problemas y a veces hasta de su marido o esposa por una noche.

Creo además que ésta Independencia es mucho más significativa para la mujer que para el hombre, ya que si miras las clásicas notas de los medios de comunicación de este país, entrevistan mil veces más a las mujeres que hablan de la lencería que se comprarán, o les preguntan en las peluquerías para que cuenten lo que van a hacer en esta velada tan especial.

En cambio los hombres siempre se las ingenian para tener más de un día de Independencia en el año.

Es lindo ver a las mujeres con esa cara de “HOY ES MI DIA”. Compran ropa y se arreglan por unas horas, preparando esta noche muchos meses antes y dejando todo pronto para que todo sea mágico.

Y no quiero ni hablar de la poca cantidad de gente que laburo hoy, estos días me hacen pensar en el “bananarismo mental” que tenemos como país a veces.

Es un día raro para mi, un día donde me siento muy ajeno, tan pero tan ajeno que no quiero ni estar en la calle, me da pavor saber que medio millón de uruguayos sale a las calles a festejar su Independencia por menos de 8 horas.

Repito, que por un lado festejar Nostalgia es algo que nos cabe bien a los Uruguayos, pero si pensamos un poco más, estamos festejando Independencia por un rato, por un rato de amor, por un rato de placer, o de alegría.

Porque digamos la verdad, en el mundo en el que vivimos, no somos independientes para estas cosas que parecen tan normales y naturales.

Hoy no somos independientes de amar o tener placer a diario, con hijos, suegras nueras, yernos y perros escandalosos en casas cada vez mas chicas con gente cada vez mas grande.

Ni somos independientes de tener alegría todos los días, algo que sería sano para todos, ya que la mayoría de la gente que vive en mi país, no llega a fin de mes, no se siente realizada y hasta la gente que económicamente esta un poco mejor, paga un precio muy alto por tener todo lo que piensa que desea.

Quizás - y sin quizás - es una mirada negativa la que hago de esta noche, pero ver como la mayoría de la gente que vive en mi país, sale a disfrutar solo 8 horas por año, me causa un poco de miedo.

Y sin duda (y esto lo digo muchas veces) cuando uno generaliza se mete en bretes, pero también es verdad que si uno lo hace, es porque lo avala la mayoría, y si bien las mayorías nunca fueron las que dominaron el mundo, son las que lo sufren.

Por eso esta noche, trata de pasar bien, y pensar en como hacer para que independizarte sea más una postura de vida, y no una fecha comercial, donde casi te obligan a ser feliz, y te usan para facturar.

Y mañana cuando te levantes, como todos los días, mientras les estés haciendo la cocoa a tus hijos o nietos, con cara de sueño, contales que quiere decir el 25 de agosto para este país. Nunca está de más enseñar desde otro ángulo, un poco más divertido que el que hace muchas veces una maestra de escuela. La que nos manda a estudiar medio de memoria, enseñándonos fechas con títulos y batallas que no terminamos de entender muy bien.

Contales que el 25 de agosto de 1825 se declara a la Provincia Oriental Libre e Independiente del Rey de Portugal, del Emperador de Brasil y de cualquier otro poder externo. Y que se establece la libertad de vientres, donde a partir de ese momento los hijos de los esclavos iban a nacer libres y por ende estos, serían libres de tráfico para siempre. Y como si fuera poco se organiza el Sistema Judicial y se proclama la Ley de Pabellón con su bandera celeste blanca y punzón (algo parecido al rojo) de franjas horizontales y con las inscripción en el centro que Reza LIBERTAD O MUERTE.

Por eso y para terminar, lee de nuevo esta bandera, lucha por tu Libertad y deja la vida para que tus hijos crezcan libres.

Porque digamos la verdad, ¿que otra cosa más importante hay en la vida para ser feliz, que ser LIBRE?

1 comentario:

  1. Bien Claudio. Otro buen articulo.
    Creo que si abrís una sección de "bananerismo nacional", podes escribir 30 artículos al hilo........... lamentablemente.

    Es lindo ver a las personas prepararse para un evento. Siempre me hace ilusión cuando veo eso... ver a la gente con ganas... de algo. Después de todo... lo que la gente quiere en esta vida, es pasarla bien, la mayor cantidad de tiempo posible. Y para eso, dejan que le vendan cualquier pastilla.

    Saludos. y felicitaciones como siempre.

    ResponderEliminar